sábado, 16 de noviembre de 2013

Publicidad, sobornos y otras maravillas. Pinta, un proyecto con mucho arte


Siempre he querido ser artista. No como Concha Velasco -o igual también- yo lo que quería era tocar la guitarra y hacerme cantautora como las de ‘Ella baila Sola’ y ser muy guay o hacer teatro alternativo y actuar en garitos muy bohemios y muy chic o hacer esculturas como mi amiga Elena que eran horribles pero nadie se lo decía y ella se creía que era la nueva Miguel Ángel alternativa y tenía tres pendientes en cada oreja.

Yo lo he intentado todo y nada ha cuajado. Ya os conté mis clases de guitarra con aquel profesor heavy que casi pierde la melena por los disgustos que le daba con la Bamba que sonaba como Noche de Paz y el Noche de Paz que sonaba como el cumpleaños. Y también os conté cuando bailaba flamenco con un reconocido bailaor que casi se muere de la alegría cuando me borré de la academia, temeroso de que le echara el tablao abajo a base de manotazos y traspiés.

Y bueno, cuando conocí al pater y descubrí su amor por la pintura –que no se le da nada mal- me mimeticé y me compré un caballete y un par de lienzos y acrílicos para parar un tren, pero mientras el cuadro del pater iba cogiendo forma y haciéndose cada vez más bonito, el mío empezaba a parecer el de una demente de El Nido del Cuco. Un drama, vamos. Y lo tuve que dejar antes de que el pater, que por aquel entonces no era pater, me dejara a mí.

Pero como soy madre de la Pantoja y quiero volcar en los nenes todas mis frustraciones, tengo intención de apuntarlos a cuantas academias hagan falta para que cojan soltura, se familiaricen y desarrollen amor por el arte y sobre todo que se diviertan mucho. Que de ahí al artisteo hay un paso.

Por eso me mola tanto Pinta, una academia valencia de artes plásticas con un concepto cercano y divertido del arte para gente de todas las edades con el único requisito de tener ganas de disfrutar de la pintura, la escultura, el dibujo y muchísimo más, porque organizan y celebran diferentes tipos de talleres todos muy interesantes y divertidos y a un precio baratito, baratito. Y además, como ellos mismos cuentan ‘Las artes plásticas aportan múltiples ventajas en el aprendizaje de los niños, destacando la potenciación de la creatividad y la imaginación para resolver cualquier tipo de circunstancia o problema, además de colaborar para que se expresen de una forma más abierta y tolerante, aumentando su confianza y su rendimiento académico en general’. Casi nada.

Y también puedes adquirir bonos para 5 o 10 sábados en los que se incluye almuerzo, material básico, bolsa de bienvenida, rifa de regalos y visitas a exposiciones. ¿Qué más se puede pedir?

Pero a las que Valencia os pilla tan lejos como a mí, no os preocupéis porque han tenido una ‘puzeridea’ que diría la pelirroja, al crear las cajas Pinta, que son cajas llenas de ideas y proyectos artísticos con todos los materiales necesarios para llevarlos a cabo y divertirse un montón gracias a sus indicaciones hechas a mano con toda la dedicación del mundo y muchas, pero muchas sorpresas para que los peques se queden con la boca abierta.

Y las cajas no son estándar sino personalizadas porque dependiendo de los gustos y la edad del homenajeado, la caja se transforma en el regalo perfecto para ellos y para sus madres que pueden descansar un rato mientras los niños le dan al arte y aprenden.

¿Pero puede haber algo mejor para regalar esta Navidad?

Paséate por su web y conoce este fantástico proyecto de Iris e Ismael. ¡Te encantará!

6 comentarios:

  1. ¡Qué buena idea! Yo también he tenido siempre un gusano creador que me come por dentro y no sé cómo sacármelo, de pequeña estaba en el coro, el dibujo lo he aparcado (lástima) y hace tres años descubrí... ¡la costura!, gran invento que combina la creatividad con el marujeo práctico, aparte de servir como terapia (ejercite Ud. su paciencia, conozca sus límetes y grítele al ojal que no sale bien en vez que a sus hijos). Mis niños también han salido pintureros y musicales, y como bien dices, lo importante no es convertirse en el nuevo David Garret sino pasárselo bien y disfrutar. Así que me parece genial este tipo de proyectos, qué pena no vivir en Valencia (ni en España, snif). Hala, todo el mundo a comprar cajas Pinta!

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    1. Pues sabes que yo estoy pensando en darme a la costura pero sólo para hacer boniteces... aunque de momento no sé si coser un botón!

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  2. Vaya, yo más bien soy como el pater, una artistilla. Con razón yo quiero que mis futuros niños sean genios matemáticos (yo soy de letras, siempre cateaba mates jaja).

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  3. A mí tampoco se me da mal la pintura, no soy Picasso, pero hago mis cosillas. Eso sí, desde que soy mami ni respiro, así que de pintar ni hablo!! Y a mí también me gustan estos proyectos. Viva la creatividad!!!

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