martes, 18 de marzo de 2014

Razones por las que no mola que me crezcan los pelirrojos


1.- Cigoto amenaza con andar o gatear o abrirse la cabeza contra el suelo, a elegir, lo cual demuestra que su sistema psicomotriz está en regla y eso me alegra, no voy a decir que no, con lo que a mí me gusta una hipocondría y un diagnóstico por Internet en un foro de venezolanas adolescentes de 2001. Pero también tiene su parte mala. Muy mala. Y es que esa vocación por autotransportarse sólo va a traerme disgustos en forma de lumbago, cansancio extremo y nuevas preocupaciones ante el mundo de pequeñas piezas y pelusones por tragar que se abre ante él y sus ansias por jalárselo todo.

2.- La pelirroja trae tareas a casa y esto es un noparar de lecturas del panadero p, el lechero l y otros infiernos que me retrotraen a la infancia o lo que es peor a cuando trato de explicarle a un guiri dónde está una calle, que ni yo me logro explicar ni él se entera de nada y todo es caos y ganas de tirarme de los pelos hasta la extenuación. Y además de la lectura, están las fichas de los fines de semana y los palitos y los circulitos y las aspas en las hojas de cuadros y todo es sinvivir. Y un sinvivir en fin de semana es doblemente sinvivir.

3.-  Cada vez tenemos menos biberones y más papillas, lo cual está muy bien para su sistema digestivo y su crecimiento y su desarrollo y todo lo que ustedes quieran, pero entre echarle unos polvillos a un biberón y moverlo a un lado y a otro cual maraca de Antonio Machín y hacer vegetales pestosos con sus pollos con piel y vísceras que arrancar y luego tener que llevarlo en un termo para liar la de dios es cristo en cualquier sitio público mientras el niño le espurrea la cara hasta al que vende los cupones, no hay color. Ninguno.

4.- A la pelirroja ya no hay quién la engañe. Ni un poquito. O sea que ya no puedo decirle que la Cenicienta se ha ido a dormir o que si no está en la tele, no podemos verla porque me suelta aquello de ‘mamá, pero zi donde eztá ez en el dizco duro…’ como si ella fuera yo y yo fuera mi madre, que tuvo un videoclub durante siete años y jamás aprendió a poner el vídeo. No a programarlo, no. A ponerlo. A darle al play, vamos.

NOTA: Mañana publico nuevos ganadores de unos pocos -pero fabulosos- regalos de nuestra megasorteo de cumpleaños porque sus primeros ganadores no han dado señales de vida... y el plazo terminaba el viernes!! Así que estad atentos, que igual esta vez sí que os toca!!!! Mañana en el blog!!! Ay, quién pudiera participar!!

9 comentarios:

  1. Oooooh, que se nos van haciendo mayores los pelirrojos!!!

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  2. Aishh!! Si lo que fastidia es volver a la casilla de inicio. Yo a la tercera he podido comprobar que es un proceso autodestructivo. Y así estoy que he tenido que abrir un blog por eso de que escribir ayuda a reflexionar...

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  3. Oooooooooooooh...a mí me da mucha penita que se me hagan mayores...definitivamente, con 6 años, ya no tengo bebés. Y está claro que estoy enferma de lo mío, porque con casi 40 tacos y unos gemelos...¡me apetece otro! Pero chica, mi marido no me colabora nada :P

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  4. Yo de los cocimientos me he librado pq siempre se los han preparado sus abuelos maternos , vamos que tengo un chollo con mis padres y todo porque a mí no me gusta cocinar y a ellos les da miedo que envenene a su único y muy esperado nieto jiji a veces el hacerse una la torpe tiene sus ventajas jaja

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  5. Y luego llega la adolescencia... No digo más. Jajaja. Besotes!!!

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  6. Rata, Reloj, Risa, Rosa, Ruso. La letra "R" la tengo grabada a fuego, por los dibujos que acompañaban a las sílabas, en mi cartilla de paláu. Nunca olvidaré el ascazo que me daba la rata y mucho menos, la cara psicópata asesino que tenía el "joputa" de la risa, que hasta pesadillas tenía con él. ¿ y cómo coños iba a saber una criatura de cinco años que los rusos llevaban ese sombrero? Pues sí, teníamos que identificar a un tío con gorro con "ru"... Pero aprendí a leer. No sé si por espabilada ó por dejar de ver al tío de la "ri".

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  7. Que sí, que crecen y crecen y lo que según el manual debía suponer más tiempo libre para la mamá, supone justo lo contrario, que a mí no me engañan, yo veo que cumplir años ellos es igual a menos horas yo. Lo de los deberes me mata, es lo mismo que llevarse el trabajo para casa, y eso antes estaba muy mal visto por los entendidos.Que la cosa se complica, antes los empaquetabas y listo, ahora ya opinan y el colador no cuela lo que debería, el mayor ya lo veo en edad pavito, que ahora parece ser que entran antes y el todolosabetodoloentiende me pilla como aquel trabalenguas que tuvo que aprender el pequeño para el cole y que fui incapaz de leer... Pero que gusto da verlos crecer sanos y fuertes y verme yo que no llego jajjajja.La de los churumbeles.

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  8. Se te ha olvidado una razón fundamental por la que no molan que crezcan....escogen ellos su ropa, no la que se van a poner al día siguiente, no, escogen lo que se compran!!! Que hartita estoy de las leggings!!!!

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  9. Jajajajaja...me parto! Mis padres tuvieron videoclub durante diez años y mi madre tampoco aprendió a enchufarlo!
    Buenísimo post como siempre.
    Un beso, Flor
    Arantxa

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